fuerte, brava, dulce y sensual.
Me he deleitado en carne viva
en nuestros encuentros furtivos
con tu sensualidad que me fascina,
y me colma de gozo
la exquisitez de saberte satisfecha de placer.
Pero ahora a muchos días de no tenerte
te visualizo estando yo adherido
al arqueo de tu cuerpo
que convulsiona con mis caricias,
mientras nuestras bocas
se buscan violentas y temblorosas
produciendo excitantes gemidos
de lujuria inaudita
que se elevan al cielo
como parte del sagrado rito del amor.
Es realmente interesante tu forma de plasmar todas las sensaciones y placeres del cuerpo humano, he quedado impresionada, todo un poeta... εїз